domingo, 21 de junio de 2009

Mi Revolución.

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Este fue un trabajo que tuve que hacer para una clase. El trabajo era un ensayo sobre como cambiaría yo el sistema político en España.
Después de devanarme los sesos durante dos días, al final decidí escribir esto, CON DOS COJONES!

Si de mi mano estuviese cambiar la configuración del estado, dado que no soy una persona partidaria de la democracia actual, es muy probables que dichos cambios se hiciesen por la antidemocrática vía de un golpe de estado. No obstante, quizá lo más seguro sería esperar a legitimar mi posición tras unas elecciones ganadas con la mayoría suficiente para asegurar mi posición en el gobierno, y apoyarme en una posible crisis de la democracia, por la que una importante parte de la población estuviese de acuerdo en el cambio a una autocracia.

Evidentemente, una vez en el poder, y haciendo uso de mi poder, reuniría los apoyos suficientes dentro del ejército, y las fuerzas de seguridad para tener el control sobre ellas, y así minimizar las probabilidades de una revuelta de importancia, con la consecuencia de una indeseada guerra civil.

También sería de máxima importancia disponer del control de los medios de comunicación, ya que la libertad de pensamiento sería peligrosa para el régimen.

Evidentemente, una vez asegurada la posición mediante dichas medidas, se declararía el estado de emergencia, y se anularía la presente constitución. La familia real sería expulsada del país, y se le dará la misma oportunidad a los dirigentes políticos de mayor importancia. De no exiliarse, ni integrarse en la sociedad, serán encarcelados durante un tiempo, para posteriormente ser expulsados por la fuerza. Si aún persistiesen en sus intentos, serían ejecutados.

Cabe esperar que durante esos primeros días surjan revueltas en diferentes partes del país. Las fuerzas de seguridad estarán preparadas para disolver, y frenar los grupúsculos, antes de que estos deriven en una guerrilla armada, de nefastas consecuencias para la seguridad del estado. Se hará uso de la fuerza si es necesario, aunque cabe la esperanza de que se suprima con el mínimo número posible de víctimas.

Evidentemente, se establecerán durante estos primeros, y delicados momentos, reuniones con los principales estados del mundo, entre ellos la Unión Europea, Estados Unidos, dirigentes de la OTAN, y demás países. Se darán a conocer intenciones no expansionistas, y se mantendrán los acuerdos comerciales, militares, y políticos, con el fin de evitar una posible invasión, o ataque por parte de los estados aliados de España.

Acto seguido, se redactará un texto constitucional donde se establecerán ciertos principios de funcionamiento del estado, y derechos fundamentales inherentes a toda la ciudadanía. Dicha constitución constará de los siguientes principios:

El estado será centralizado, con todas sus competencias gestionadas por el gobierno. Las comunidades podrán ejercer ciertas competencias en festividades tradicionales, y deportes, siendo estas aprobadas previamente por el Estado.

Los impuestos serán gestionados por el Estado Central, y repartidos en el territorio en función de las necesidades de cada uno. Las partidas presupuestarias se pactarán mediante la presentación de los proyectos que sea necesario ejecutar, con la consiguiente aprobación del Estado Central. Tendrán prioridad los proyectos de las comunidades de mayor importancia, entre ellos, la construcción o reforma de hospitales, y otros servicios sanitarios, la construcción de vías de comunicación, la construcción o mejora de la educación, servicios de asistencia a discapacitados, etc.

Ni que decir tiene, las autonomías quedarán anuladas. Todas ellas serán gestionadas mediante la colocación de Alcaldes, y el equipo administrativo mínimo necesario, para así conseguir minimizar la presión a las arcas del estado. Para dichas administraciones, se premiará la meritocracia. Los alcaldes serán, por ley, funcionarios de carrera, y habrán de demostrar sus habilidades de gestión. Quedará en manos del Estado Central destituir a los alcaldes poco capacitados, y que demuestren deslealtad hacia el régimen.

Se mantendrán las direcciones generales. Más, todo aquel que desée acceder a las posiciones de alto cargo, y subordinados directos, tendrá que demostrar su lealtad hacia el régimen, y ser licenciados en la materia de la que se quieran hacer cargo. No se aceptará la asignación de cargos a dedo, ni se aceptará la lealtad como requisito universal.

Se establecerá por ley un salario justo para todos aquellos que dediquen su vida a la política, situado en un límite de entre 3000 a 4000 euros mensuales, dependiendo del cargo, y funciones del mismo. De este modo, será mayor la cantidad de fondos en las arcas del estado, y estas podrán destinarse a las diferentes necesidades del País.

Los políticos vivirán en sus respectivas viviendas, nunca en edificios estatales, y sus gastos habituales de vivienda nunca correrán a cargo de las arcas del estado.

En materia de economía, se fomentará la entrada de capital extranjero. No obstante, se crearán empresas estatales, como automóviles, y bancos, destinados a los menos favorecidos. Del mismo modo, los servicios estratégicos, como el energético (es decir, petrolíferas, y diferentes empresas de energía), recaerán en manos del Estado.

Se mantendrán los sindicatos, pero no recibirán ayuda del Estado Central. Para conseguir una mayor eficiencia en la protección del trabajador, frente al empresario, todo sindicato dispondrá únicamente de lo que sus afiliados paguen por cuotas sindicales. Esta ley se aplicará igualmente a las patronales, serán legales, pero sin recibir ayuda alguna por parte del Estado Central.

Se establecerá una empresa de construcción estatal, destinada a la construcción de servicios estatales (hospitales, escuelas...), y viviendas de protección oficial. Dichas vivendas estarán en régimen de venta, o alquiler, cuyo pago irá destinado íntegramente al Estado Central. El acceso a dichas viviendas será para los más desfavorecidos.

Del mismo modo, el acceso a dicha vivienda, al igual que a los servicios de escolarización pública, becas escolares y universitarias, ayudas a discapacitados, concesión de préstamos hipotecarios, y para otros menesteres, del banco estatal, y demás servicios, primarán los ciudadanos Españoles, con más de tres generaciones, frente a inmigrantes, e hijos de los mismos.

Se fomentará la construcción de guarderías en los centros de trabajo, o directamente ayacente al mismo, como empresa privada (o pública, si se diese el caso). Será obligatorio, en centros de más de 100 trabajadores, facilitar el acceso de guarderías al mismo centro. Esto se hará para facilitar a la madre la posibilidad de trabajar.
La madre, si está en sus posibilidades, podrá llevar a sus hijos pequeños al centro de trabajo con ella, y no se permitirá discriminación de ningún tipo por parte del empresario.

Se reestablecerán centros psiquiátricos para los casos más graves, incurables, y peligrosos para la seguridad de sí mismos, y de los demás ciudadanos. En los casos graves, e incurables, será legal el internamiento de por vida con autorización de los familiares. En los casos en los que el enfermo respresente un peligro para la seguridad ciudadana, no será necesaria la autorización de los familiares para proceder al internamiento vital.

En la vía penal, todos los presos condenados por homicidios, asesinatos, violaciones, pederastia, terrorismo, robo con violencia, y grupos violentos, perderán automáticamente la categoría de Ciudadano. En dichos casos, será legal la cadena perpetua, si la gravedad del caso lo sugiriese. Dichos presos serán obligados a trabajar para el Estado, en los menesteres que dicho Estado considere oportuno.

En los casos de robos, estafas, prevalicación, presos políticos, y demás delitos menores, que no pongan en riesgo la vida de la ciudadanía, se mantendrán los derechos fundamentales, y la categoría de ciudadano. No se descarta la posibilidad de que dichos presos participen en las obras estatales, y demás servicios, como instrucción laboral en vistas a su salida de la prisión. En dichos casos, queda prohibida la cadena perpetua.
Dichos presos tendrán un salario mínimo, para facilitar su reinserción.

Si aún, los presos reinsertados, reincidiesen en sus antiguas prácticas, sería legal, dependiendo de la gravedad del delito, la aplicación de penas más duras.

Se proclamarán derechos fundamentales para todos los ciudadanos. Entre ellos, el derecho a la vida, a la seguridad, a la salud, a la educación, a disponer de una vivienda, a un trabajo, al transporte, y a una formación de calidad.

El precio de la vivienda será incluido en el IPC, como forma de controlar dicho precio, y evitar la especulación con derechos fundamentales. No será así con bienes de lujo, como joyas, o vehículos de alta gama.

Serán legales los referendums convocados por el Estado Central, para conocer la opinión de los ciudadanos en la proclamación de algunas leyes de importancia. Del mismo modo, serán legales las manifestaciones que no tengan caracter político, asociaciones que no sean de caracter político, y demás organizaciones y temas no relacionados con la misma. Cualquier manifestación, o asociación política, podrá ser suprimida por la fuerza si es necesaria, y se procederá a la detención de los principales implicados.

El estado se declarará aconfesional, pero mantendrá relaciones cordiales con las diferentes diócesis que en dicho estado existiesen. No se subvencionará con fondos estatales ninguna religión, pero serán legales las donaciones de particulares a las mismas.

En dicha asignatura saqué un 7.5. XD

1 comentario:

la reina del hielo dijo...

yo estoy de acuerdo en muchas cosas, en el actual estado que tenemos se gasta mucho dinero en chorradas y no en lo importante, sería genial poder despedir a los funcionarios, desde luego. Yo incluiría medidas para que las empresas privadas inviertan en I+D y no lo hiciese el gobierno todo y más inspecciones fiscales a las grandes fortunas; pero hay que solucionar de alguna forma el gasto público y con tanto chorreo con las autonomías no se puede