martes, 23 de junio de 2009

SAVE THE WHITE, FEATHERED DRAGON!


Imagen Sometida a COPYRIGHT!

No es algo nuevo, llevo bastante tiempo dándole vueltas al asunto, y finalmente me he decidido a escribir algo sobre el tema.

El mundo se acerca a su fin, contaminamos, y contaminamos sin parar. El calentamiento global nos afecta a todos, y amenaza con destruir nuestras costas, nuestra maravillosa casa comprada a pie de playa, y todos acabaremos engullidos por una gigantesca ola Tsunami, como en la película Deep Impact. Finalmente, una enorme capa de hielo cubrira el planeta, y será como vivir en una gigantesca bola de nieve. O puede que la atmósfera, misteriosamente, se diluya en el espacio exterior, y acabemos habitando un planeta yermo y desértico como Marte.

Todos los días nos bombardean con el cambio climático (es cierto, ya no és Calentamiento Global, ahora és Cambio Climático), a todas horas y en todos los medios. No es posible coger un periódico sin leer alguna referencia, aunque sea un artículo sobre el último secuestrado de Las Farc. Ya no veo los documentales, salvo los de Felix Rodriguez de la Fuente, que me compré cuando salió la edición coleccionista hace algunos años, no soporto que en el capítulo sobre la vida del zorrito fenec saharawi me hablen de como se están fundiendo los polos. Las noticias, tres cuartas de lo mismo;
Un aparatoso accidente de coche se salda con 74 vehículos destrozados, y 109 personas en el hospital por contusiones. SEGURO que el cambio climático influyó en la presión de los neumáticos.

Bueno, cachondeo aparte, lo siento por los 74 vehículos, y los acompañantes de los torpes de los conductores.

Aparentemente, los catastrofistas del cambio climático necesitaban una víctima martir para que la gente tomase consciencia de la situación de la tierra. Es por ello que hoy en día, en muchos programas de conservación de especies animales se menciona al cambio climático como causante de su extinción. En concreto un animal muy utilizado es el Oso Polar.
Por qué el oso polar en concreto?

Simplemente, porque es grande, peludo, blanco, y aparece en los anuncios de Coca Cola. Es un animal que gusta a la gente, porque su manto blanco, y su apariencia de peluche le hace parecer, a los ojos humanos, una criatura beneficiosa, digna de ser elogiada. Por un momento, los sentimientos humanos nublan la razón, y no vemos en el oso al grande, sanguinario, y peligroso depredador de 800 kilos que realmente és. Solo vemos al peluche que tu pondrías encima de la cama.

Detalle curioso sobre la población de osos polares. En 30 años se ha multiplicado por 5. No hablamos de que haya pasado de 100, a 500 ejemplares, que ya nos conocemos como manipular cifras. Ha pasado de 5000 a 25,000 ejemplares. Nada mal para un depredador que vive en uno de los desiertos más grandes del mundo.

Existe, parece que cada vez más, una concienciación que roza el fanatismo por preservar especies animales, especialmente aquellas que están en peligro de extinción. Nos alegramos como locos cuando escuchamos que se ha avistado un delfín del rio Yangtse, y pienso yo;
De qué cojones nos alegramos? Un solo delfín no va a salvar la especie!

Pero cuales son aquellas especies amenazadas, por las que tanto se lucha? Principalmente grandes gatos, como el leopardo nival, del que apenas quedan unos pocos ejemplares. Lobos, que irónicamente están aumentando su población en la práctica totalidad del planeta. Ballenas varias, que no esta mal. Preciosos monitos, por eso de que son simpáticos. Gorilas, imagino que a raiz de la película Gorilas en la Niebla. Algún tipo de pez se cuela en la lista de animales a proteger. Y, como no, el oso panda, logotipo de la fundación WWFN (World Wildlife Fund for Nature).

Pero quién se acuerda de la Brachypelma Mesomelas?
http://nl.wikipedia.org/wiki/Roodbeenvogelspin
(y no me pregunteis por qué no existe una página del bicho que no esté en un idioma legible)
Ese agradable animalito, peludo como el oso polar.

La verdad es que poca gente. O quizá la musaraña nariz de elefante, que está amenazada a pesar de haber 20,000 ejemplares calculados en libertad.

O el bicho este; maculinea nausithous.
Bueno, de este sí se acordó nuestra eminentísima, y altamente añorada ministra de fomento, Magdalena Álvarez.
Para quien no recuerde la historia, esta señora decidió construir un tunel de dos kilómetros, por debajo de un lugar que era hogar para una mariposa endémica, la maculinea, que aparentemente solo vive en un kilómetro cuadrado de todo el planeta.
Irónicamente, el tunel se desplomó.
El gasto, entre la construcción del tunel, y la perdida de máquinas sepultadas bajo toneladas de tierra (gracias al cielo que no murió nadie), fue desorbitado. Todo por una mísera mariposa que, de todos modos, está condenada a la extinción.
Un bicho que solo vive en un kilómetro cuadrado necesita algo tan trivial como que caiga un rayo y se origine un incendió, o venga un temporal especialmente violento, para ser barrida de la faz de la tierra. Destinar tantos esfuerzos y dinero a preservar un animal así, por mucho que a mi me gusten los animales, pero es de tontos.

Otro ejemplo claro, y este lo digo con todo el dolor de mi corazón.
El lince ibérico. lynx pardinus.
Veamos, es un animal cuya población ha descendido de 1000 ejemplares en 1960, a 400 en el 2000, y finalmente a finales del 2005 se contabilizaban 100 animales.
Su éxito en la caza es paupérrimo. Tiene un índice de fallo de un 40%. Para hacer una comparativa, el Perro Salvaje Africano da muerte en un 95% de los intentos de caza. EL problema del lince es que los conejos, de los que se alimentaba, han ido desapareciendo debido a la mixomatosis, lo que ha causado un drástico cambio en us dieta, y este no ha sido capáz de adaptarse.
Por otro lado, los cachorros sufren de tendencias violentas, y es muy habitual que uno de ellos mate al otro cachorro, por lo que tienen que ser separados.

Vamos a ver, un animal que no caza bien, que no cría bien, y que encima es caprichoso a la hora de reproducirse (pues son animales solitarios), sencillamente está condenado a extinguirse.

Lo mismo puede decirse del oso panda. Para criar, son un infierno, como catorceañeros. Las crías miden unos pocos centímetros al nacer. Y solo se alimenta de bambú.
Tres cuartas de lo mismo. Muy bonito, pero a la larga son animales condenados.

Yo soy la primera que me gustaría ver la supervivencia del lince, del leopardo nival, y de otras miles de especies amenazas, pero seamos serios, el 90% de las especies del planeta se han extinguido, para fortuna nuestra la verdad, pues no me gustaría encontrarme mañana con un rex en la carretera.
El clima del planeta sufre cambios, los niveles de oxígenos varían, y eso causa que especies que antes se adaptaban bien, se vean incapaces de soportar los cambios.

Por mencionar algunas más recientes, tenemos al rinoceronte lanudo, al smilodon, al más conocido mamut, y al canis dirus, antepasado de nuestros lobos. De hecho, los fósiles de dirus más modernos encontrados datan del siglo X.
Fueron animales de una época, la glaciación. Terminada esta, sus posibilidades de supervivencia se vieron mermadas, y finalmente fueron desplazadas por presas más rápidas, y cazadores más pequeños y ágiles.

En algún momento, el 90% de nuestras especies acabarán extinguiéndose, y siendo reemplazadas, o desplazadas por animales más capaces de sobrevivir.

Un ejemplo evolutivo se está dando en Rusia, donde los lobos salvajes están siendo lentamente desplazados por perros-lobo, vástagos de perros salvajes que se cruzaron con lobos. Son más fuertes, fieros, y resistentes que sus primos, y en algún momento acabarán reemplazando al lobo como una especie de cánido más. Un par de siglos, y los rasgos de este animal se habrán definido.

Continuando con este hilo de pensamiento, hay animales que solo viven en determinadas zonas, recluidos en pequeños areas de terreno, con clima muy específico. Mientras estas zonas funcionen como una bola de cristal, y nada entre, ni cambie, el animal estará a salvo. Pero vasta cualquier pequeña influencia externa, cualquier modificación, para que la especie entera se extinga.
Tal es el caso de muchos tipos de animales selváticos e isleños, como el colibrí, el loro de puerto rico, y todos los animales de las galápagos, entre otros.

Entonces, desde un punto de vista administrativo, merece la pena preservar a estos animales?
Sinceramente, creo que un animal condenado, condenado está, y ese dinero se puede aprovechar en obras de mayor importancia.

Siempre se nos habla con horror de los miles de animales que se extinguen, o están en peligro. Pero nunca se nos habla de aquellos que se adaptan, que expanden su población, como el citado lobo (cuya población está creciendo desde que se prohibió su caza), el ciervo de cola blanca, el jabalí europeo, muchas aves rapaces, y una larga lista de etcs.

1 comentario:

la reina del hielo dijo...

toda la razón, no queremos la naturaleza, queremos peluches; pero sí que es verdad lo de que nos hemos comido el hábitat de muchas especies, que hemos metido especies invasoras en ecosistemas y los hemos destruido (por lo de los peluches) y que el agujero de la capa de ozono está ahí.